jueves, 20 de agosto de 2009

SILESTONE


Es un tipo de superficie que, en pocos años, se ha convertido en uno de los artículos estrella de una empresa española que ya opera en todo el mundo, Cosentino. Su éxito radica en reunir lo mejor de la piedra natural y la cerámica en un mismo producto, fundamentalmente gracias al cuarzo, una opción elegante, higiénica y original de decorar tu casa.

Silestone es una superficie constructiva y ornamental relativamente nueva en el mercado. Lleva desarrollándose desde 1990 y actualmente ya configura una alternativa sólida a los tradicionales revestimientos cerámicos. Sus aplicaciones más habituales apuntan a las encimeras de cocinas y baños, aunque su versatilidad va mucho más allá: suelos, paredes, mostradores de comercios y bares, escaleras, bañeras, mesas...

El material

El cuarzo es la piedra elegida para elaborar las planchas de Silestone, un material natural, resistente y con muchísimos matices de color, lo que ofrece muchas posibilidades decorativas en casa. Está compuesto de un 94% de cuarzo natural, una piedra que deriva de la cristalización magmática del calcáreo.
Por su dureza y resistencia a los ácidos, es frecuente su uso en la fabricación de los más variados productos que requieren precisión y amplias prestaciones. El formato más habitual en el que se comercializa Silestone es en tablas de 304 x 138 cm. y 304 x 133 cm, disponibles en tres grosores distintos: 12, 20 y 30 mm. (el precio aumenta cuanto más grosor tenga la plancha). Existen asimismo en 49 colores diferentes, aunque las gamas aumentan año tras año.

Resistencia y mantenimiento

Al no ser una superficie porosa, este tipo de material es bastante resistente a las manchas más comunes que se producen con el ajetreo diario. Respecto a su dureza, el cuarzo está en el 7 de la escala de dureza de Mohs (el diamante es el número 10), lo que convierte a Silestone en uno de los revestimientos más resistentes a rayados y arañazos.

Eso no significa que sea invulnerable a los desperfectos: debemos tratarlo normalmente, sin excesiva fuerza y sin abusar de su resistencia. También aguanta adecuadamente el calor, aunque no es recomendable dejar recipientes que han estado al fuego sobre estas superficies. Los salvamanteles nos ayudarán a que permanezca durante más tiempo en perfecto estado.

Su mantenimiento es sencillo porque apenas lo necesita. No obstante, el distribuidor podrá explicarte cuáles son los mejores productos para limpiar las manchas de cal o grasa, o para recuperar el brillo perdido por el uso frecuente. Asimismo, alejaremos del Silestone productos agresivos como decapantes, desengrasantes, sosa o cloros. La superficie del material no debe ser pulida.

Innovación antibacterias

El grupo español Cosentino ha invertido 70 millones de euros en la investigación de un nuevo producto: la superficie de cuarzo con protección antibacterias. "Aún se encuentra en los primeros pasos de producción en toda la gama de colores de Silestone", nos detalla Salvador Alfonso. "Está prevista su comercialización a mediados de 2005 y no va a subir de precio, se trata de una cualidad adicional más al resto de sus ventajas".

El hecho es que, objetivamente, y obviando el lógico lenguaje comercial de los responsables de la empresa, el Silestone antibacterias es una innovación que ha llamado la atención de una de las revistas más prestigiosas, la estadounidense Time, que la ha seleccionado como uno de los siete productos tecnológicos que mejorarán la calidad de vida de las personas en el siglo XXI. Esta novedad amplía las aplicaciones de las superficies de cuarzo al sector de la hostelería, centros hospitalarios y laboratorios.

Silestone en el mercado

Es obvio que un producto con tantas variedades y aplicaciones, dispone de una considerable fluctuación respecto a los precios. Depende de los colores escogidos, el grosor de la plancha, la demanda de cierto producto... "Aunque el importe es variable, 220 euros es la media por metro lineal", explica Santiago Alfonso, director de Marketing de Cosentino.

Silestone es un producto que se vende en todo el mundo, con una excelente aceptación en Estados Unidos. En este país los colores marrones, ocres y oscuros son los más demandados, en consonancia con las tendencias vigentes. Por su parte, en España es más frecuente ver tonos blancos, "aunque poco a poco hay más licencia para jugar con el diseño y los consumidores se decantan por colores más chillones, como rojos o azules".

Sin duda, las posibilidades decorativas de los materiales con los que hoy en día hacemos hogar son cada vez mayores y Silestone es una muestra evidente de ello. El cuarzo y la empresa que está detrás, Cosentino, es una alternativa importante a considerar en la decoración de tu casa, gracias a sus ventajas, funcionalidad y, sobre todo, capacidad de innovación.
(Foto perteneciente de Guaita).

INSONORIZA TU VIVIENDA

En ocasiones, ni siquiera estar en casa nos aporta esos momentos de tranquilidad que deseamos cuando volvemos de la calle. Parece que traemos el ruido con nosotros; y es que el ir y venir de tus vecinos, el instrumento que toca tu hijo o el continuo tráfico que no deja de molestar con sus sirenas y pitidos se han alojado con nosotros. Una de las soluciones más eficientes para paliar estos trastornos es insonorizar la estancia. Es un recurso muy práctico que puedes trasladar a toda la casa e incluso aplicar a muchos objetos que consideres una molestia. Si tienes este problema, te enseñamos a solucionarlo.

Lo más habitual es que aislemos tan solo las habitaciones donde tengamos ruido; por ejemplo, si tocas un instrumento, o bien las que necesiten silencio. También puedes insonorizar únicamente las zonas de donde proceda: el techo, una pared, las ventanas o incluso el suelo. Piensa que si solucionas el problema recubriendo lo menos posible, ahorrarás dinero y conservarás más espacio porque este procedimiento reduce, aunque poco, el espacio de la estancia.

Hoy en día existen materiales para todo tipo de superficies: desde los más comunes, para paredes, ventanas y puertas, hasta amortiguadores para sistemas de ventilación, maquinarias que están en el exterior del edificio, extractores, sistemas de climatización, etc.

Tipos de aislantes
Espuma de poliuretano: es un buen aislante acústico. Hay muchas variedades en espuma y son prácticamente incombustibles.

Fibras minerales: son bastante ligeras e no inflamables. Las puedes encontrar de roca o de cristal.

Fibras vegetales: resistentes a los golpes y muy rígidas. Las encontrarás en losas o paneles. Son inflamables porque están compuestas por hilazas de madera compactas.

Películas plásticas de aluminio: se venden en rollos y son fáciles de colocar. Sólo tienes que aplicarle una cola especial y adherirlas a la superficie que quieras aislar.

Losas de poliestireno expandido: son fuertes y se alicatan utilizando una cola plástica.

Soportes elásticos: evita que uses puentes acústicos para insonorizar la habitación.

Cerramientos: son sencillos y rápidos de instalar y traen la ventaja de que se adaptan a cualquier circunstancia y superficie.

Barrera acústica: son paneles que nos ayudan a aplacar el ruido que proviene de aparatos a cielo abierto; el sistema de climatización colocado en una azotea, por ejemplo.

Silenciadores acústicos: se colocan en los tubos de ventilación, aparatos de aire acondicionado, extractores, etc.

Cómo insonorizamos nuestra habitación
Antes de ponerse manos a la obra, tenemos que preguntarnos qué ruidos son los que nos molestan y qué zonas queremos insonorizar. Además tenemos que decidir los aislantes que vamos a utilizar; ya que no todos son igual de efectivos en las mismas condiciones. Existen, incluso, materiales que ofrecen resistencia al fuego, evitan la humedad, soportan golpes, etc. Es necesario conocer su efectividad antes de colocarlos.

Procedimiento
Paredes: se deja una cámara de aire entre nuestra pared y el aislante que vamos a colocar. En el espacio que queda entre ambos se introduce un absorbente. La nueva pared la revestiremos con cartón-yeso. Los enchufes los empotraremos en la nueva pared de modo que queden fijos.

Techos: se sigue el mismo procedimiento; se engancha un techo flotante, entre ambos, un absorbente, y luego recubrimos la superficie con cartón-yeso. Cuanto mayor sea la cámara de aire, mejor será el aislamiento. Cerciórate de que no quede ninguna instalación sobre el techo original porque si necesitamos utilizar algún cable, por ejemplo, nos resultará muy difícil acceder a él si tenemos que atravesar dos superficies.

Suelo: colocaremos un aislante antivibratorio, amortiguadores y planchas de madera prensadas. Dispondremos sobre el nuevo suelo el revestimiento: losas, tarimas, gres, moqueta... Recuerda que la cámara de aire tiene que estar siempre presente.

Ventanas: las podemos insonorizar aplicando un doble acristalamiento y cerciorándonos de que se encuentren bien selladas a la pared.

Puertas: son imprescindibles si quieres un cuarto perfectamente aislado. Aquellas habitaciones que están completamente revestidas (ventanas, techos, suelos, paredes y puerta) se las conocen como cajas flotantes.

Podemos insonorizar todas las zonas que consideremos que lo necesitan; incluso las paredes de los armarios empotrados.
(Información procedente de Euronoisecontrol.com, El Mundo, http://www.mailxmail.com/.)

EL PLADUR

Uno de los materiales más empleados en la construcción y en la decoración es aquel que está compuesto por planchas formadas por dos hojas de cartón (celulosas) y una parte central de yeso, más conocidas como Pladur. Miden normalmente 2,50 m. de largo por 1.20 m. de ancho (aunque hay otras medidas) y su espesor oscila entre los 6,5 y los 18 mm. Es una alternativa útil para colocar falsos techos, tabiques, chimeneas o, incluso, fabricar muebles.

Tiene una larga historia, ya que nació en Estados Unidos en 1890 y llegó a Europa en 1917. Desde entonces, se han colocado más de 100.000 millones de metros cuadrados de este producto en todo el mundo, por la buena relación que ofrece entre su precio y la calidad final del producto.
Este componente se coloca fácilmente y además, permite crear tanto formas rectas como curvas. Las ventajas más importantes son su resistencia, su fácil colocación y su poder aislante. Por otro lado, el Pladur es incombustible y absorbe la humedad en exceso, expulsándola cuando el ambiente es seco.
(Informació procedente de Uralita)

Tipos de planchas

• Pladur N
Es la placa estándar. Tiene el yeso central de color blanco y la parte que quedará a la vista de color blanco o gris claro. Sirve para todas las aplicaciones del material en general como albañilería, decoración, etc.

• Pladur TEC
Aunque en principio tiene las mismas características que el anterior, es más resistente, por lo que está indicado especialmente para la colocación de techos continuos.

• Pladur FOC
Resistente al fuego, se colocará en zonas que deban ser protegidas de este elemento. Su especial propiedad se la otorga la fibra de vidrio incorporada al yeso central, que en esta variedad de material es de color rosa. Este ingrediente también lo poseen las planchas M0, que son incombustibles.

• Pladur WA
A esta plancha se le han añadido aceites siliconados, que la convierten en resistente al agua. Esta ventaja lo hace perfecto para baños y lugares que están a la intemperie como los porches.

• Pladur GD
Aunque la variedad normal es bastante resistente a los golpes, este tipo en concreto tiene dureza reforzada, por lo que consideraremos su aplicación en zonas susceptibles de recibir impactos.

• Pladur FON
Es una nueva gama de placas de yeso laminado con perforaciones de distintas geometrías. Pladur FON mejora la absorción acústica de los locales dónde se instala . En su dorso llevan incorporado un velo de fibra de vidrio, con el fin de mejorar la absorción acústica. Si bien está indicado para espacios públicos como hoteles, cines, restaurantes, cafeterías, salones de acto, etc, también resulta muy adecuada su instalación en zonas comunes de vivienda (pasillos, vestíbulos, entradas,... ). Su prescripción puede ser para aplicaciones en techos o trasdosados.

Para estanterías o muebles existe una placa específica, Pladur trillaje, que está formada por dos placas Pladur tipo N de 10 mm de espesor unidas por su "dorso" con un trillaje de celulosa especial en forma de nido de abeja que da rigidez al conjunto.

USOS
En albañilería interior su puede utilizar para forrar muros que ya tengamos colocados, ya sea para rehabilitarlos o para mejorar el aislamiento, tanto acústico como térmico. Asimismo, son muy útiles para colocar falsos techos, fijos o desmontables. En este caso, primero tendremos que colocar una estructura en la que después se pondrán las planchas. Si necesitamos protección contra el fuego, elegiremos las gamas destinadas a este fin.

No se puede perder de vista su función decorativa del hogar, ya que con este material se pueden crear estanterías, cabeceros o cúpulas. Del mismo modo, decorar estas planchas, con pintura o papel es incluso más sencillo que en las paredes tradicionales.

Material para instalarlo
Es imprescindible adquirir estructuras de acero galvanizado, que formarán la base donde clavaremos el Pladur. Por supuesto, tenemos que disponer de las planchas de yeso y cartón necesarias para cubrir el esqueleto anterior. Por otra parte, es necesario un papel especial con el que facilitaremos las uniones entre placas para conseguir un efecto de uniformidad.

Los tornillos son el elemento clave para unir la estructura con las láminas. Para tapar la tornillería y las imperfecciones del mueble, pared o techo, disponemos de masilla especial para lograr un acabado perfecto.

Aunque nosotros mismos somos capaces de llevar a cabo la instalación, lo cierto es que requiere bastante trabajo y altas dosis de paciencia. Si no tenemos tiempo y queremos un resultado excelente, es mejor acudir a profesionales para que lo coloquen.

ARREGLOS
En ocasiones, nos daremos cuenta de que las planchas, aunque poseen alta resistencia, presentan algún desconchón o roce. Arreglarlo es una tarea muy sencilla. Lo primero que haremos será raspar la superficie para que no queden restos de material dañado. Después, tendremos que aplicar una disolución selladora y remataremos con un emplastecedor normal. Todos estos productos los encontrarás en tiendas especializadas.

Si el problema es que una tubería u otro dispositivo situado detrás del Pladur ha sido dañado, habrá que retirar un trozo de placa para arreglarlo. En primer lugar cortaremos la plancha que tapa el lugar dañado con una sierra de calar o de punta y repararemos el elemento estropeado. Para restaurar el cartón y yeso dañados, colocaremos en el interior del hueco creado varias piezas de madera, atornillándolas al resto de la lámina. Sobre el agujero colocaremos un nuevo trozo de Pladur, fijándolo a las piezas de madera. Finalmente, aplicaremos un poco de pasta o masilla para tapar la separación creada por el corte de la tabla.

TIPOS DE PINTURA

Barniz para parqué
Son barnices especiales de gran resistencia al roce y al desgaste, pudiendo ser de dos componentes que se mezclan en el momento de su uso.

Pinturas plásticas
Estas pinturas están compuestas por una resina sintética (vinílica o acrílica) que se haya emulsionada en agua.
Son las mas indicadas para el pintado de nuestras paredes. Para su dilución emplearemos agua, así como para la limpieza de los utensilios. Son inodoras y secan rápidamente, las podemos encontrar en acabado mate, satinado o brillante, siendo las de calidad perfectamente lavables.

Esmaltes sintéticos
Formulados a base de resinas alquímicas, precisan de disolvente para diluirlas y para su limpieza. Secan entre 5 y 10 horas, siendo su acabado duro, resistente y lavable. Se fabrican en acabados brillantes para el exterior y satinado y mate para interiores.

Pinturas grasas y óleo sintéticas
Compuestas de resina, incorporan una cantidad de aceite, generalmente de linaza. Su secado es mas lento que el de las sintéticas (10-15 horas), siendo su dureza y brillo de calidad inferior. Son lavables.

Barnices
son normalmente trasparentes, siendo su aplicación más natural sobre madera. Su acabado puede ser brillante, satinado o mate. Podemos encontrar también barnices con tinte incorporado y en varios acabados: roble, castaño, nogal, caoba, etc. Al contener una composición mixta de tinte y barniz, es conveniente que agitemos bien este tipo de barnices antes de su aplicación.

Protectores para la madera
Son productos que protegen a la madera que está a la intemperie. Su principal ventaja es que penetran profundamente en la madera, no formando una película continua, con la consiguiente ventaja de que al envejecer no se forman desconchones, pudiendo aplicarles otra mano de protección cuando lo estimemos oportuno. Contienen sustancias hidrofugantes, fungicidas e insecticidas, completando así la protección de la madera. El aspecto del producto es mate y semitransparente.

Pinturas de clorocaucho
Están compuestas por una base de resina de caucho tratada químicamente con cloro, consiguiendo una gran resistencia al agua y a sustancias agresivas como los ácidos. Se utilizan para el pintado de instalaciones industriales y deportivas, así como para piscinas. Su secado es rápido y su dilución y limpieza es a base de disolvente.

Esmaltes al agua
Se caracterizan por llevar agua como disolvente, dando al mismo tiempo un alto brillo. En la actualidad las resinas más utilizadas para su fabricación son acrílicas en emulsión, por lo que también se las llama esmaltes acrílicos al agua. Destacar su color de gran permanencia así como la facilidad de limpieza de los utensilios de trabajo con agua.

TÉCNICA DECAPÉ Y CRAQUELADO

Cuando hablamos de 'técnica decapé' nos referimos a un sistema francés de decoración que tuvo sus orígenes en la época de Luis XV. El decapé consiste en pintar los muebles de blanco, pastel, gris… creando una veladura para suavizar e iluminar el aspecto del mueble. Las piezas decapé armonizan perfectamente con las paredes pintadas en gris pálido, azul celeste, color fucsia, verde manzana…
Los decoradores franceses, para cambiar la ornamentación de los palacios sin hacer grandes dispendios, decapaban sobre todo muebles pequeños y de asiento y luego los pintaban, de ahí la denominación de 'decapé'.

Craquelado
El craquelado es un método de envejecimiento. Dentro de los acabados es uno de los más comunes, prácticos y fáciles de realizar. Se reproducen las finas grietas que se forman a menudo en la superficie de viejas pinturas al óleo, lozas antiguas y muebles ajados por el paso del tiempo.

El craquelado se produce naturalmente por la contracción gradual y despareja de las distintas capas de pintura. Colocando una capa de base sintética (secado lento) y otra encima de pintura de base acuosa (secado rápido) obtendremos este efecto. La pintura sintética seca lentamente generando tensiones superficiales durante un lapso de tiempo mayor; por esto, la capa de pintura superior, que es acrílica y secó rápidamente, se resquebraja siguiendo los movimientos de las tensiones de la pintura de base.

Para avejentar una superficie podemos recurrir a un preparado de tipo casero o a los productos elaborados especialmente para lograr este efecto: 'craqueladores'. El resultado óptimo de éstos depende de que sigamos al pie de la letra las especificaciones de cada fabricante. Son, en algunos casos, productos muy sensibles al calor y a las corrientes de aire, los cuales modifican el tamaño de las grietas.

Craqueladores de un componentes
Se aplican en general entre dos colores contrastantes, por ejemplo:
Base acrílico color natural / secar.
Aplicación de barniz craquelador tratando de no superponer material.
Aplicación de acrílico oscuro con pincel o con esponja y dejar secar. Se puede acelerar el proceso de secado por medios mecánicos con calor tibio sobre el trabajo a una distancia de no menos de 25 cm.

En forma casera, el craquelador de un componente puede reemplazarse por el efecto que produce una capa generosa de cola vinílica. En ambos casos, la dirección de las pinceladas aplicadas en la capa intermedia serán las que definirán el sentido de las grietas.

Craqueladores de dos componentes
Estos craqueladores son aptos para craquelar bases, pinturas y láminas porque son traslúcidas. Por ejemplo:
Aplicamos dos manos del primer componente dejando secar entre una y otra.
Se aplica el segundo componente que al secar produce el efecto deseado.

Un método casero para realizar este tipo de craquelado sin usar productos dañinos: 1 mano de goma laca / secar.
1 capa de cola vinílica / secar.
1 mano de goma arábiga.

Terminación
En el caso de utilizar colores contrastantes para craquelar, el efecto queda evidente sin la aplicación de otros elementos para destacarlo. Sobre un decoupage (Consiste en recortar trozos de papel o tela y pegarlos en un soporte, de forma que, con una capa final de barniz, parecerá que está pintado, y dará la sensación de que lo acabamos de comprar, con la ventaja adicional de que tendrá un toque muy personal),la trama de las grietas puede unir estéticamente el conjunto de elementos recortados, más aún destacadas por una pátina al óleo, al agua o betún de judea. En cualquier caso, una vez que el craquelado ha terminado es conveniente dejarlo reposar durante una hora antes de esta aplicación. Cuanto más grueso sea el barniz de base, más anchas serán las grietas. Con una base fina de barniz, lograremos grietas finas.

Técnica decapé
materiales y elaboración
• Lijas de madera.
• Pintura plástica mate blanca, gris cualquier color suave.
• Látex.
• Pinceles y brochas.
• Cera de ebanista nogal.
• Pintura al óleo color teja.

Procederemos a abrir el poro de la madera, lijando en el sentido de la veta. Mezcla a partes iguales de pintura, látex y agua. Con el pincel se extiende muy poca cantidad de veladura. Acto seguido, rasca algunas zonas con un trozo de lija de forma que las rayadas descubran el color de fondo. Cuando la veladura esté casi seca, dale otra mano. Las pasadas tienen que ser rápidas y con el pincel casi seco. Rompe la uniformidad del color con una pizca de pintura al óleo. Peina el mueble con un pincel casi seco. Vuelve a pasar la lija por algunas zonas (raspado) insiste en los canto. Enceras, dejas secar y frotas para darle brillo.